Viajar en familia siempre es algo divertido, pero puede volverse estresante si no se elige correctamente el destino. Movilizarse en transporte público en una gran ciudad con niños pequeños, por ejemplo, puede ser un problema por el gran nivel de atención que hay que prestar para evitar que ningún miembro de la familia se pierda. Si el objetivo es descansar y recargar energía para el resto del año, es bueno considerar todas las opciones posibles según el estilo y los gustos de cada grupo familiar.
Un principio básico para cualquier viaje familiar es respetar los horarios de las comidas y de descanso de los más chicos, para evitar que se enfermen o se sientan mal durante las vacaciones.
Dependiendo del destino, también es importante protegerlos del sol con bloqueadores de alta graduación, sombreros y evitar la exposición prolongada entre las 11 y las 16 h.
Es imprescindible llevar elementos para el cuidado de los hijos como: productos de higiene, ropa, y medicamentos, pero no se deben sobrecargar las valijas ya que puede dificultar el desplazamiento en el viaje.
Llevar también Botiquín básico y el tel del médico de la familia o pediatra
Importante!!! Según el destino, averiguar requisitos legales: permisos para salir del país, DNI actualizado, vacunas obligatorias, etc.
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